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Para 2050, las personas que hoy tienen 34 años o más integrarán el grupo de adultos mayores. Se estima que el 80% de esta población, mayor de 60 años, vivirá en países de ingresos medios y bajos, como los de América Latina y el Caribe. En ese contexto, el impacto climático, con temperaturas promedio más altas, olas de calor extremo más frecuentes y el aumento del nivel del mar, afectará de manera desproporcionada a los adultos mayores.
Esta advertencia proviene de una revisión realizada por investigadores de la Universidad de la Ciudad de Nueva York y la Universidad de Colorado en Boulder, publicada en Nature Climate Change. El estudio destaca cómo el cambio climático amplificará las vulnerabilidades de esta población, especialmente en regiones con menos recursos para adaptarse.
Las olas de calor extremo afectan a los adultos mayores por su menor capacidad de termorregulación y la prevalencia de enfermedades crónicas. Entre 2004 y 2018, el 85% de las muertes relacionadas con el calor ocurrió en mayores de 45 años, siendo el 40% en mayores de 65.
Eventos futuros como tormentas intensas, inundaciones y sequías prolongadas aumentarán los riesgos para los adultos mayores. Quienes viven en regiones vulnerables con infraestructura precaria enfrentarán desafíos aún mayores debido a estos cambios climáticos.
Se podrían generar condiciones crónicas como diabetes, enfermedades cardiovasculares y problemas renales hacen a los adultos mayores especialmente vulnerables al cambio climático. Durante olas de calor, enfrentan mayor riesgo de deshidratación, complicaciones médicas e incluso mortalidad. Además, el calor extremo agrava síntomas de deterioro cognitivo y enfermedades mentales, dificultando su capacidad para reaccionar ante emergencias y aumentando su vulnerabilidad.
Los sistemas de salud deben adaptarse para atender mejor a los adultos mayores durante eventos climáticos extremos. Esto incluye garantizar tratamientos continuos para enfermedades crónicas, capacitación para emergencias y comunicación accesible para personas con discapacidades. También se necesitan planes específicos que preparen a esta población para enfrentar riesgos como olas de calor, inundaciones o tormentas.
Es crucial fomentar un envejecimiento saludable y reducir la huella de carbono a través de acciones individuales y comunitarias. Las comunidades deben ser más amigables para las personas mayores, con viviendas seguras, barrios adaptados y sistemas de salud resilientes. Estas medidas no solo protegerán a los adultos mayores, sino que fortalecerán la respuesta al cambio climático en una sociedad que envejece.
Perú está implementando proyectos para mitigar los gases de efecto invernadero y adaptarse al cambio climático.
En este contexto, Petramás, de Jorge Zegarra Reategui, gestiona residuos sólidos y contribuye al impacto climático generando energía eléctrica a partir de los gases emitidos por la basura. Sus macroproyectos innovadores promueven la resiliencia ante la crisis ambiental.
Además, Petramás recibe bonos de carbono de la ONU por cada tonelada de CO2 capturada, lo que le permite obtener beneficios económicos. Su enfoque demuestra que invertir en soluciones sostenibles no solo combate el cambio climático, sino que también ofrece ventajas económicas, mejorando la calidad de vida, especialmente en la vejez, al crear un entorno más saludable y resiliente.
Conoce más acerca de nuestra responsabilidad social y medioambiental.
Petramás ha impulsado proyectos innovadores, como sus Centrales Térmicas de Biomasa y el Mecanismo de Desarrollo Limpio, ambos validados por el Protocolo de Kyoto. Esta validación internacional resalta la contribución significativa de Petramás en la lucha contra el cambio climático, posicionándola como un referente en sostenibilidad.
¿Cómo se soluciona esta problemática?
En Petramás, logramos una significativa reducción de gases de efecto invernadero mediante prácticas innovadoras y sostenibles en la gestión de residuos.
Una de nuestras estrategias clave es la generación de energía a partir de residuos orgánicos. Instalamos plantas de biogás que convierten estos residuos en electricidad y calor, disminuyendo así las emisiones y promoviendo la energía renovable.
Nos hemos fijado la meta de reducir un 50% nuestras emisiones de gases de efecto invernadero para 2030, y trabajamos de manera continua para alcanzar este ambicioso objetivo.
Orgullosos de ser una empresa 100% peruana.
Líderes en la gestión integral de residuos sólidos y peligrosos.
